Un seminarista ratificó un abuso y complicó al padre Justo Ilarraz

POR OSCAR LONDERO

Según su declaración, fue cuando estaba bajo su tutela en Paraná.

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Acusado. Al padre Justo Ilarraz se le atribuyen más de 50 casas de abuso.

PARANÁ. CORRESPONSALÍA - 20/09/12

“Este tipo es un degenerado. Por eso me decidí a hablar”. Así lo reconoció a Clarín el primer testigo que se presentó ante la Justicia entrerriana y ratificó uno de los casos de presunto abuso sexual que se le atribuyen al sacerdote Justo Ilarraz. S.D. –sólo se difunden sus iniciales para no entorpecer la investigación– es un ex seminarista de 36 años que el martes reveló lo que ocurrió hace más de 20 años, cuando ingresó al Seminario Menor de Paraná y quedó bajo la tutela de Ilarraz.

Como muchos de los pupilos que estuvieron a cargo del cura que hoy está bajo sospecha, provenía de una población rural cercana a Paraná. Su testimonio no sólo significó un impulso al expediente. También complicó la situación procesal del sacerdote, que si bien no está imputado, había interpuesto un hábeas corpus para no ser detenido. Lo hizo ante la Justicia de Tucumán, donde hasta la semana anterior ejerció como párroco de la iglesia Sagrado Corazón de Jesús.

Desde entonces se encuentra con licencia y paradero desconocido, luego de que la revista Análisis revelara cómo trató a sus pupilos en el Seminario de Paraná.

Entre otras cosas mencionó que acarició, bañó y se acostó junto a algunos de los adolescentes que tuvo a su cargo. Además reveló que con otros mantuvo sexo oral y que varios pudieron viajar por acceder a sus pedidos. Eso también fue detallado por S.D. durante su testimonio en Tribunales.

En tanto, otro ex seminarista indicó a Clarín : “En aquella época había rumores, pero yo me enteré de esto recién en el 2007”. Ese año volvió a encontrarse con S.D., que le contó su experiencia. “Lo que me dijo fue tal cual lo que se conoció la semana pasada”, precisó.

Ilarraz presentó el hábeas corpus por intermedio de su abogado, Jorge Muñoz, quien mañana llegará a Paraná y accederá al expediente. Según el letrado, “al no estar hechas las denuncias de las supuestas víctimas, esto es algo totalmente abstracto y nulo”. Lo dijo antes de que se produjera el testimonio de S.D. Ahora, tras esa declaración y la de otros ex seminaristas, la causa puede quedar caratulada como abuso de menores.

Luego de recibir la primera declaración, que se extendió por espacio de dos horas, el fiscal de Cámara, Rafael Cotorruelo, radicó una denuncia ante el juez de Instrucción de turno, Alejandro Grippo. Además la Fiscalía solicitó que el Arzobispado de Paraná brinde copia del Juicio Diocesano iniciado a Ilarraz.

Esas actuaciones administrativas, que fueron giradas al Vaticano, contienen testimonios de algunos pupilos que Ilarraz tuvo a su cargo entre 1984 y 1992, período en el que se habrían producido los hechos que investiga la Justicia. En tanto, el procurador general de Entre Ríos, Jorge Amílcar García, aseguró ayer que “existen varias víctimas más que están dispuestas a declarar y que probablemente lo hagan entre esta semana y la próxima”

Fonte: CLARIN