Cardenal Bagnasco: "Cuando los casos de abusos se repiten, el tormento es indescriptible y la humillación total"Estos casos de abusos sexuales causan "daños incalculables a jóvenes vidas y a sus familias"Dados cartográficos ©2011 - Termos de UsoRedacción, 23 de mayo de 2011 a las 19:28
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El cardenal señaló que sobre la "integridad" de los sacerdotes no pueden "transigir, cueste lo que cueste" /> Cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la CEI
El cardenal Bagnasco, presidente de la Conferencia Episcopal italiana Cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la CEI 01 El cardenal Bagnasco, presidente de la Conferencia Episcopal italiana 01El presidente de los obispos italianos, el cardenal Angelo Bagnasco, dijo hoy que los casos de abusos sexuales a menores por parte de clérigos siguen siendo una "infame emergencia" que todavía no ha sido superada y que la iglesia italiana está comprometida a afrontar con urgencia.
El cardenal arzobispo de Génova y presidente la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) hizo estas declaraciones en el discurso con el que abrió en el Vaticano su 63 Asamblea, en la que se refirió a la reciente carta circular de la Congregación para la Doctrina de la Fe con las líneas maestras para el tratamiento de los casos de abusos sexuales a menores por parte de clérigos.
Bagnasco aseguró que estos casos de abusos sexuales causan "daños incalculables a jóvenes vidas y a sus familias".
"Por ellos, los prelados no cesamos de mostrar nuestro dolor y nuestra incondicional solidaridad a esas jóvenes y sus familias", subrayó el purpurado, quien agregó que desde hace más de un año dentro de la CEI se ha creado un grupo de expertos para poner en marcha dentro la Conferencia Episcopal Italiana la normativa del Vaticano contra la pederastia.
El cardenal señaló que sobre la "integridad" de los sacerdotes no pueden "transigir, cueste lo que cueste", y subrayó que, aunque sólo se diera un caso de abusos, "sería demasiado".
"Cuando los casos se repiten, el tormento es indescriptible y la humillación total", señaló el cardenal, quien, no obstante, resaltó la labor de la inmensa mayoría del clero, "que se prodiga con fidelidad, sacrificio y alegría en el cuidado de la comunidad cristiana".
El pasado 14 de mayo, el sacerdote Riccardo Seppia, de 51 años, párroco de la iglesia del Espíritu Santo, en la barriada de Sestri Poniente, en Génova, la diócesis de Bagnasco, fue detenido bajo acusación de abusar sexualmente de un menor y de consumir estupefacientes, confirmó el propio cardenal.
Seppia fue suspendido inmediatamente de sus funciones por la Curia genovesa, y, tras informar del hecho, el cardenal Bagnasco expresó "dolor y desconcierto por la gravedad de lo ocurrido".
Además de Seppia, también fue detenido el exseminarista Emanuele Alfano, de 24 años, quien, según los medios locales, "reclutaba" menores para que mantuvieran relaciones homosexuales con el sacerdote, a los que pagaba y con los que también mantenía relaciones él mismo.
La rápida actuación de la Curia genovesa para apartarlo del sacerdocio y cooperar con la autoridad civil se enmarca en la línea de "tolerancia cero" impuesta por el papa Benedicto XVI para los abusos sexuales contra menores por parte de clérigos.
En la carta enviada por el Vaticano el pasado día 16 a todos los obispos del mundo para preparar las líneas maestras de la lucha contra la pederastia se señala que los puntos prioritarios son la colaboración con las autoridades civiles, la atención a las víctimas, los programas de prevención y la formación permanente de los seminaristas y del clero. (RD/Efe)
Fonte: RELIGIÓN DIGITAL
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